Esta noche no he podido pegar ojo.

Not sleep a wink.

Buenos motivos para dormir.

¿Se te ocurren buenas razones para no dormir?.

Os dejo algunas de ellas. ¿Te animas a completar la lista?

  • Un mosquito en el cuarto.

  • Tu pareja ronca.

  • Viajes y cambios horarios.

  • Comidas copiosas.

  • Una fiesta en el piso de arriba.

  • Tus hijos que no vuelven.

  • La subida de la gasolina.

  • Un ERE en tu empresa.

  • Una alarma que salta.

  • Algún problema de salud.

Nuestra vida transcurre entre la vigilia y el sueño, cuya importancia biológica es indiscutible. Afrontar un día, si no has dormido durante la noche anterior, es un reto complicado. En dormir empleamos una tercera parte de nuestras vidas.

Se considera que el sueño es una necesidad básica para la supervivencia de los organismos. Ninguna persona puede dejar de dormir varios días seguidos. Nuestro cuerpo tiene que recuperarse de la actividad diaria y también necesita la reestructuración psíquica. Esta última es la responsable de sistematizar y clasificar lo que ha ido ocurriendo a lo largo de la jornada.

La función del sueño es universal. La edad modula el tiempo de dormir, que es diferente en cada persona. La media (en horas) de un adulto se considera de unas siete u ocho, y en los recién nacidos de quince horas al día.

Los factores que afectan al sueño son diversos. La estimulación ambiental puede producir dificultades para dormir. A veces el estrés, las preocupaciones, el horario laboral u otras causas pueden mantener activa la mente.

“El sueño … Cumple funciones elementales, desde la simple, aunque fundamental, recuperación física, hasta la más sofisticada, pero no menos importante, función de recuperación, regulación y estabilización de las potencialidades mentales y psíquicas que incrementan exponencialmente la capacidad adaptativa del individuo”. Palmero.

Cuando no descansamos, porque dormimos poco o mal, puede provocar dificultades físicas (fatiga, cansancio … ), problemas cognitivos (falta de concentración, pérdida de memoria …) y afectar a nivel anímico (provocando irritabilidad, apatía, ansiedad, aumento del apetito …)

Estas son algunas de las pautas para intentar descansar y conciliar el sueño.

  • Dormir y levantarse a la misma hora

  • No dormir en otras horas (siestas…)

  • Evitar la cafeína, el tabaco y el alcohol.

  • Practicar alguna actividad física al aire libre con regularidad.

  • No comer cenas pesadas.

  • Cuidar el ambiente del dormitorio, qué esté ventilado, que sea cómodo, oscuro, tranquilo y que mantenga una temperatura adecuada.

  • No utilizar dispositivos electrónicos (portátil, móviles …) antes de dormir

  • Intentar relajarse (leer o escuchar música).

  • En caso de problemas de salud debemos acudir a nuestro médico.

Y como no podía ser de otra manera terminamos este post con una frase del dramaturgo y poeta español,

“¿Qué es la vida? Un frenesí. ¿Qué es la vida? Una ilusión, una sombra, una ficción; y el mayor bien es pequeño; que toda la vida es sueño, y los sueños, sueños son.” Pedro Calderón de la Barca.

Inma Díaz.

Como bibliografía del texto he utilizado el libro “Psicología de la motivación” de la Uned.

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